1.25.2007

Caza de migrantes/ 2005

Caza de migrantes, el deporte de temporada
Roberto Gerhard Tuma

La pobreza es un gran problema que aqueja a toda América Latina, es una pobreza tal que hace que la gente tenga que dejar su tierra y buscar mejores oportunidades en el país más rico del continente. Esta pobreza empuja a la gente a desplazarse hacia un país totalmente desconocido para ellos, un país que oficialmente no habla su idioma ni comparte sus costumbres, que muchas veces los rechaza y los repudia. Así emprenden un tortuoso camino lleno de peligros hacia el norte.
Las oleadas de migración han sido tan grandes que poco a poco se habla de una reconquista de la frontera sur en Estados Unidos, cada vez se vuelve más importante saber hablar español en algunos lugares. Este es un proceso que me parece lógico. Los pobres son atraídos hacia los focos de riqueza, es algo que pasa en todo el mundo. En Europa tienen un problema similar con los turcos y africanos que entran de manera ilegal para tratar de ganar más dinero que en su patria. En general el migrante tiene la esperanza de poder alcanzar una vida digna, sin las carencias con las que ha crecido.
Estados Unidos, nación que fue formada por emigrantes, que se dice ser la tierra de la libertad resulta que ya no quiere más gente, o más bien esta aceptando un tipo de emigración calificada. Las universidades americanas están llenas de chinos, coreanos, indios, europeos y latinos, tratan de atraer a lo mejor de los demás países. Ese es el tipo de gente que quieren, no les interesan los analfabetas sin educación que no aporten al país ni al crecimiento científico y cultural del mismo. Actualmente la sociedad americana no acepta a esta gente como ciudadanos sino hasta que hayan vivido ahí dos o tres generaciones. Esto también es algo lógico, si tu ves que alguien esta trabajando durante una temporada y la mayoría del dinero que gana lo envía fuera de tu país, es difícil que lo puedas ver como un conciudadano. Más bien lo verías como un pirata que esta sacando recursos de tu país.
Lo que no ven es que esta gente realiza los trabajos que la mayoría de los americanos ya no quiere realizar, además que las empresas dedicadas a la agricultura ganan con este tipo de trabajadores. Esto inclusive es un argumento económico a favor de la migración, en el momento que aumenta la mano de obra barata, puede aumentar la producción y así disminuir su precio lo cual beneficia al país en su conjunto. Por otra parte, ellos también están dispuestos a realizar aquellos servicios como limpiar los pisos, los baños, las mesas, freír papas, cortar el pasto, etc; todos los trabajos que carecen de glamour y que la sociedad americana ya no quiere realizar.
Puede que sea cierto y que estos trabajadores ilegales, dada su situación de indocumentados trabajan más barato y entonces les ganan los puestos. La migración es un problema que no podrán detener hasta que se resuelva la pobreza en los países de dónde viene esta gente, esto quiere decir en mucho tiempo. Mientras tanto, la migración será un fenómeno presente, la solución óptima sería reglamentar esto para que así la competencia por salarios no fuera vista como desleal.
Esto nos lleva a otro problema, la xenofobia y el racismo que se padece en las regiones pobres, ignorantes y fronterizas de Estados Unidos. Para ellos los ideales de la patria en la que viven no son más que frases bonitas, que se presumen pero no se quieren aplicar. La gente al ver que su gobierno es incapaz de controlar y detener estos flujos decide actuar por su propia cuenta. Esto los lleva a un estado de naturaleza Hobbesiana donde el más fuerte logra imponer su voluntad, donde no existe el estado que vele por mantener la ley. Es verdaderamente el salvaje oeste del siglo XIX, es la noción de cazar indios, es la noción de luchar por tu tierra y defenderla de los salvajes. Es una zona donde los dos países se han hecho de la vista gorda y el problema queda en declaraciones hipócritas de políticos hipócritas. El trayecto hacia la tierra de los sueños es un proceso a través del cual se les despoja de todos sus derechos como seres humanos, reina la incertidumbre y son sujetos a las vejaciones más tristes. Son degradados al nivel de un animal, en el momento que se les puede cazar abiertamente, no son menos que un venado o un pato. ¿Me pregunto quiénes son los verdaderos animales? contemplo cómo cuando se disuelve la autoridad del estado el ser humano es capaz de caer en abismos obscuros y terroríficos. Son los cazadores los que se convierten en animales en el momento que se niegan a ver a los migrantes como seres humanos, como sus iguales.
¿A quién le importa esta gente? ¿Acaso sólo podemos hacer valer nuestros derechos como seres humanos si tenemos dinero? Tristemente nadie se preocupa verdaderamente por defender los derechos de los migrantes y tristemente parece ser que solo tienes derechos si tienes dinero para hacerlos valer y la educación suficiente para saber cuáles son. ¿Sabrá algún migrante que existe la declaración universal de los derechos humanos? ¿Sabrá en teoría, por el simple hecho de ser humano es sujeto de derechos inalienables?
Lo irónico es que E.U. y México condenan el maltrato a los derechos humanos en Cuba cuando ellos dos son incapaces de defenderlos en sus propios territorios. Condenan el maltrato en Cuba cuando las muertas de Juárez sigue siendo un misterio y cuando los soldados estadounidenses torturan a irakis. Hasta que estos dos países no sean un ejemplo de la defensa a los derechos humanos, no deberían criticar este problema fuera de casa y si en verdad están tan preocupados por el problema, dado que son vecinos ¿por qué no arreglan y defienden los derechos humanos de los migrantes?

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